¿Cómo realizamos las inyecciones de neuromoduladores?
25/04/2025
05/05/2025
Por anamorfosis entendemos la deformación (y restitución) de una imagen mediante proyección o perspectiva distorsionada. Los primeros ejemplos los encontramos en el dibujo y la pintura —en general con el objeto de ocultar o dar énfasis a un cierto mensaje— aunque, como vimos, hoy se extienden por técnicas industriales desde el Cinemascope a la rotulación de envoltorios o del tráfico. Una de las formas de anamorfosis más curiosas emplea un espejo especial para la reconstitución de la imagen “normal”. La capacidad de los espejos para deformar, expandir o comprimir las imágenes —algo bien conocido por cualquier chiquillo tras visitar un parque de atracciones— no podía pasar desapercibida a los ojos del artista. Esto se manifiesta desde el momento en que el realismo se impone al simbolismo medieval. Quizá el más célebre ejemplo sea el espejo convexo en el fondo del cuadrito de Jan van Eyck “El Matrimonio Arnolfini” en el que, con un detalle hiperfotográfico, se capta toda la escena desde detrás.
A partir de la época del Barroco aparecen los primeros “anamorfoscopios”, invento al parecer chino que habría llegado a Europa a través de los comerciantes venecianos, así como tratados donde se describen técnicas para construir anamorfosis oblicuas o catóptricas. De estas, el tipo más común consiste en un cilindro de superficie reflectante que debe colocarse en determinado punto sobre el dibujo o pintura anamórficos. Siendo la imagen plana irreconocible en su observación directa, aparece restituida a su forma normal en el reflejo especular, el cual puede verse desde diferentes ángulos. Este artificio se empleó para difundir entre un público confidencial caricaturas y escenas de brujería, escatológicas o eróticas.
En el siglo XIX las anamorfosis se popularizaron junto con otros juegos visuales como los caleidoscopios o los estereoscopios y han sido revisitadas por surrealistas como Salvador Dalí y numerosos artistas contemporáneos, especialmente en el campo de la ilustración. Aparte de los cilíndricos, también pueden emplearse espejos cónicos, piramidales, esféricos o de otras formas, en función de la construcción de la imagen.
Las anamorfosis por espejos no son sino una variante de la deformación por perspectiva, solo empleando un método inusual. De forma paralela, el desarrollo de la geometría de los espacios curvos por Bernhard Riemann (1826-1866), que tuvo un papel básico en la teoría de la relatividad de Einstein, permitió abordar de forma científica la creación de anamorfosis para aplicaciones “serias”, desde la cartografía y las militares hasta las publicitarias. El interés lúdico por las anamorfosis ha renacido —de la mano de la misma revolución tecnológica que las había orillado como entretenimiento— con la aparición de programas y aplicaciones que permiten crearlas fácilmente a partir de las hoy omnipresentes imágenes digitales.
Prof. Rafael I. Barraquer, director médico del Centro de Oftalmología Barraquer